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Un refugio de vida silvestre

Un inmenso espejo de agua dulce

La laguna Cabral posee atributos naturales imposibles de superar por ecosistema o ambientes similares en la República Dominicana y en el planeta, razón más que suficiente para la que esta área fuera declarada como Humedal de Importancia Internacional, en febrero del 2011, en el marco de la Convención Ramsar sobre Humedales. 

El refugio de vida silvestre laguna Cabral, está situado a unos 10 metros sobre el nivel del mar y posee una profundidad de unos 4 metros. En sus límites incluye los humedales aledaños, así como también la laguneta seca y el Cerro Cristóbal al norte.

Este refugio de vida silvestre hace honor a su categoría de conservación: aquí cientos de especies de aves nativas, endémicas y migratorias se dan cita durante determinadas épocas del año, con el propósito de reproducirse, alimentándose y luego alzar vuelo hacia otros ambientes similares, vecinos o de ultramar. Junto a las aves, camineros, peces, patos, jicotea y una gran variedad de moluscos, encabezan la lista de las formas de vida originales que existen en ella.

Toda esta riqueza biológica se complementa con elementos culturales, historia y gran belleza de sus paisajes, dándole al área un enorme potencial para la recolección, la educación y el ecoturismo.

La laguna Cabral es un inmenso humedal que se conserva desde tiempos precolombinos. Cientos de especies de aves nativas, endémicas y migratorias se dan cita durante determinadas épocas del año, con el propósito de reproducirse, alimentarse y, luego, alzar vuelo hacia otros ambientes similares, vecinos o de ultramar.

Camarones, peces, patos, jicoteas y una gran variedad de moluscos encabezan la lista de las formas de vida más originales que pueden existir en cualquier rincón del planeta.

CLIMA 

El clima de la zona es semi-árido, con una precipitación promedio anual de 870 mm; y un índice de evaporación muy alto (alrededor de 2000 mm por año). Las temperaturas tienen un promedio anual de 26.8 oc.

SUELOS

Los suelos del valle son principalmente ¡ de origen marino, excepto los que están alrededor del río Yaque del Sur y de la laguna que son de origen fluvial y lacustre.

Los suelos en los llanos son muy fértiles, renovándose con cada crecida del río, mientras que en lugares como en el lado Oeste de la laguna, donde no llegan los canales de riego y existe una alta evaporación, se extienden suelos con alta salinidad.

HIDROLOGÍA

La Laguna tiene gran importancia para la hidrología del Valle de Neiba. El régimen hídrico de la laguna depende mucho del río Yaque del Sur, sobre todo en tiempos de tormentas y aguaceros. 

Estas aguas son vertidas en el lago Enriquillo a través del canal Cristóbal.

Este canal no siempre lleva agua, debido a bajos niveles hídricos en el Yaque y a procesos de sedimentación en el lecho del mismo canal. Existen, también, varios manantiales en los alrededores de los poblados de Cabral y La Lista que también vierten sus aguas hacia la laguna. 

GEOLOGIA

El territorio donde se localiza el refugio constituye una de las partes bajas que se formaron a raíz de la emersión de la isla, en que se elevaron del mar lo que hoy son sus montañas más altas, quedando los fondos con características de valle, con depresiones que al pasar el tiempo se han nutrido de agua dulce proveniente de los canales que conectaron con el río Yaque del Sur y la precipitación de la zona.

La sierra de Bahoruco, cuya ladera norte conecta con este humedal, se formó en el terciario, hace más de 6 millones de años. En cambio, el cerro Cristóbal y la loma de Sal y Yeso al suroeste de la laguna, se formaron en los últimos cinco millones de años debido a movimientos tectónicos de las paleo isla del norte y del sur, que al quedar conectadas formaron tanto la depresión de esta laguna como la del lago Enriquillo.

RECURSOS NATURALES

Esta área protegida comprende dentro de sus límites, el cuerpo de agua de la laguna de Rincón y de la laguneta Seca, así como humedales adyacentes con eneales, manglares y salitrales. El cerro Cristóbal está cubierto de bosque seco. En las cercanías de la laguna se extienden zonas de vocación agrícola, donde se cultivan plátanos y guineos bajo riego.

Vegetación Natural

Las especies vegetales típicas de esta zona son: cambrón (Acacia macracantha), guayacán (Guaiacum officinale), cayuco (Piloscereus polygonus), saona (Ziziphus rignoni) almácigo (Bursera simaruba). Entre las cactáceas figuran el caguey (Neoabottia paniculata), la pitahaya (Harrisia nashii), la alpargata (Opuntia moniliformis) y la guasábara (Opuntia caríbea).

En las orillas de la laguna encontramos: eneas (Typha domingensis), loto (Nelumbo lútea), lila de agua (Nymphea spp), hierba de jicotea (Nymphaea ampia) e hierba de cotorra (Ceratophyllum demersum).

Avifauna

Se han reportado 75 especies de aves pertenecientes a 15 órdenes y 34 familias, entre ellas: el flamenco (Phoenicopterus ruber), la cuchareta (Platalea ajaja), el pato criollo (Oxyura dominicus), gallito prieto (Loxigilla violacea) y la garza pechiblanco (Egretta tricolor).

Reptiles

En el caso de los reptiles podemos encontrar la jicotea endémica del suroeste (Trachemys decorata); el cocodrilo (Crocodylus acutus), que sube ocasionalmente desde el lago Enriquillo a través del canal Cristóbal; y reportes de la Iguana Rinoceronte (Cyclura cornuta) en algunos sitios del cerro Cristóbal.

RECURSOS CULTURALES

Arqueología

La región está relacionada con vestigios de asentamientos precolombinos. En las estribaciones de la sierra de Bahoruco se han reportado algunos de los asentamientos más antiguos de la isla de La Hispaniola y se narra la presencia aquí de importantes figuras de la raza aborigen, como el caso del indio Guaconel, a quien se le atribuye la creación del poblado de Cristóbal.

Antropología

Los pueblos adyacentes a la laguna están matizados por creencias místicas religiosas en las que predominan tradiciones cristianas. Existe además una alta incidencia de curanderos.

Las poblaciones poseen costumbres tradicionales que muestran vestigios de solidaridad, ya poco comunes, relacionadas con ayuda en los trabajos agrícolas. Esta práctica denominada convite, se manifiesta cuando los individuos se reúnen para ayudar en las tareas de los cultivos, en donde el propietario del predio pone la comida del día. Las fiestas patronales constituyen parte de las tradiciones de estos pueblos y son conmemorativas a santos y patronos de los mismos.